En México, la seguridad privada es una actividad regulada que debe cumplir con ciertos requisitos legales. Tanto las empresas prestadoras del servicio como quienes los contratan deben asegurarse de que todo esté en regla. De lo contrario, pueden enfrentarse a multas considerables e incluso sanciones administrativas.
¿Qué significa contratar servicios no autorizados?
Contratar servicios de seguridad privada no autorizados significa contratar a una empresa o persona que no cuenta con el permiso oficial expedido por la Dirección General de Seguridad Privada (DGSP), dependiente de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Este permiso es obligatorio para operar legalmente, y garantiza que la empresa cumple con los estándares necesarios en materia de personal, capacitación, armamento, equipo, protocolos, y responsabilidad civil.
Multas por contratar seguridad sin autorización
Según la Ley Federal de Seguridad Privada, así como los reglamentos estatales correspondientes, las multas pueden variar dependiendo de la gravedad de la infracción y del estado en el que se cometa, pero en términos generales, las sanciones incluyen:
- Multas desde 200 hasta 5,000 veces la UMA (Unidad de Medida y Actualización).
En 2025, una UMA diaria equivale a $108.57 pesos, por lo que las multas pueden ir desde aproximadamente $21,700 hasta $542,850 pesos mexicanos. - Clausura temporal o definitiva del establecimiento donde opere el personal no autorizado.
- Responsabilidad solidaria del contratante, es decir, la empresa o persona que contrata también es sancionada, no solo la empresa de seguridad irregular.
Riesgos adicionales
Más allá de las sanciones económicas, contratar seguridad no autorizada implica:
- Responsabilidad legal en caso de incidentes, daños o delitos cometidos por el personal.
- Pérdida de confianza ante clientes, socios o autoridades.
- Problemas laborales y fiscales al no tener personal formalmente registrado.
- Mayor vulnerabilidad por falta de controles en procesos de selección y capacitación.
¿Cómo verificar si una empresa está autorizada?
Puedes consultar directamente en el portal de la Dirección General de Seguridad Privada o solicitar a la empresa su permiso vigente. Este debe contener:
- Número de autorización federal o estatal.
- Vigencia actual.
- Alcance territorial.
- Tipo de servicios que puede prestar.
Conclusión
Contratar seguridad privada sin autorización no solo es una falta administrativa grave, sino que representa un riesgo directo para tu empresa y tus colaboradores. Siempre verifica que la empresa esté debidamente registrada y cumpla con todas las normativas legales. La seguridad comienza con decisiones responsables.
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